lunes, 15 de junio de 2009

Lo infantil: categoría del Arte Nuevo

Algo falla dentro del Arte Contemporáneo entendido como sistema. Por supuesto no voy a intentar teorizar sobre las razones que llevan a personas con una formación aceptable a ridiculizar el cánon crítico, la justificación teórica, la suficiencia de la modernidad basada en la innovación, el discurso vacío de significado. Pero hay aspectos del funcionamiento de esta maquinaria totalizadora que no convencen a muchos. El relativismo impera; todo se puede explicar, y la misma crítica, se hace significante; ella es la que, en muchos casos, otorga valor artístico a las obras que opta por proteger en su redil. "Noto en esta obra muchas horas de meditación", dice un entrevistado de aspecto bohemio ante la obra pintada por un grupo de niños de infantil, que una periodista ha logrado colar en la Feria Nacional por Excelencia... Lo cierto es que cada poco tiempo los medios de comunicación nos sorprenden con noticias como esta que se produjo en la pasada edición de ARCO: No es la primera vez ni será la última. Ya Gombrich había hecho un experimento, en el que en la salida de su facultad , había interrogado a alumnos sobre su elección entre una imágen que representaba un paisaje de Constable y otra que garabateada por un niño intentaba acercarse torpemente a la primera. Cual fue la sorpresa del profesor cuando la mayoría de los cuestionados expresó su preferencia por la segunda. En el caso de estos inermes temerarios televisivos, el espacio físico de exposición les derrumba la mirada, porque al cruzar el umbral de la feria pisamos terreno sacro, y la contundencia de la elevación a sagrado achica cualquier criterio. Para más "inri", la locuaz señora coleccionista entrevistada todavía adopta un gesto más concentrado cuando le hacen saber el precio: 15000€....Ella no se extraña y responde: "Y podría costar mucho más". Ante esta comedia de situación, uno cabría preguntarse: ¿Será el esnobismo consustancial al Arte Contemporáneo?.




miércoles, 20 de mayo de 2009

A vueltas con el realismo


¿Por qué dentro del mundo del Arte Contemporáneo no existe un decidido apoyo a
aquellos pintores que,sabiéndose pertenecientes a su tiempo,siendo conscientes de la tradición heredada y procuradores de un conocimiento crítico acerca de la historia de las vanguardias,desarrollan su trabajo recreando lo real y sosteniéndose por una técnica y un oficio legado a través de siglos de pintura europea?.
¿No es éticamente admisible que un pintor estudie la obra de Rembrandt ,Velázquez ,
Vermeer,para aplicar sus recursos técnicos a la elaboración de su propia obra, en aras de una determinada representación de la realidad ,significante de un concepto previo?.¿Es que la crítica solo ve justificables las influencias de los movimientos pertenecientes al s.XX?.
¿No son hoy las herramientas tradicionales del oficio de pintor tan válidas para crear como lo son aquellas que se aplican, por ejemplo, en formato digital?.¿Qué posee la estampa del pintor de caballete,que saca de quicio a gran parte de la crítica actual?. ¿Cual es la razón de que la imagen del pintor moderno, se identifique con la visión de un Pollock en el suelo de su estudio haciendo dripping… y sin embargo, quede tan lejos del perfil de creador contemporáneo, la fotografía de Balthus, en su estudio de la Villa Medici de Roma al lado de sus cuadros dispuestos en caballetes,o la de un Morandi artesano, pintando en su pequeño cuarto de Bolonia(incluso la imagen de Antonio López pintando del natural en la Gran Vía)?
¿Por qué se ha hecho de la innovación y de la experimentación conceptos determinantes de la creación plástica?¿Dónde queda la originalidad innata a cada expresión individual?(Jorge Castillo en una conferencia en La Coruña, que prologó su antológica en la sala de exposiciones de Caixa Galicia, contestando a uno de los asistentes en el coloquio final sobre el porqué de su estilo figurativo, expuso como ejemplo para explicar la distancia que le separaba del Realismo, que a él jamás se le ocurriría pintar un “huevo” de manera naturalista, porque ya había sido hecho,y de forma genial, por Piero de La Francesca en su obra “La Virgen de Montefeltro”;lo que el pintor gallego quería decir, es que el arte no puede progresar con la pintura realista, porque esta, se habría agotado en su propia finalidad imitativa.Sin embargo siglos más tarde que el maestro de Borgo San Sepolcro, La Tour,Chardin o Manet siguieron pintando naturalezas muertas y no se plantearon hacer nada rompedor,simplemente, ocuparon su tiempo en hacer una pintura excepcional.)
¿Es que hay algo intrínsecamente corrupto en la habilidad para la recreación de los objetos mediante el lenguaje pictórico?.Si es así,¿esta situación pervive desde el nacimiento de las vanguardias, o es un hecho que debemos considerar que existe con anterioridad a 1907?.¿Se atrevería alguien a criticar a Zurbarán por sus objetos ordenados sobre un mesa?.¿Realmente en 2009 no cabe la posibilidad de aceptar una cobertura conceptual que explique un diálogo honesto con la realidad?.
Afortunadamente, tengo la impresión,de que está tomando cuerpo una nueva sensibilidad, que tiende al reconocimiento de este lenguaje plástico como propio del Arte de nuestra época y como reflejo de una actitud crítica individualizada ante lo establecido.Después de todo,pasados ya cien años,¿no se han hecho clásicas las vanguardias?.¿En quien reside ahora el dictado de los cánones que en el s.XIX recaía sobre los recalcitrantes estamentos oficiales?.Sinceramente,…¿alguien puede pensar que el realismo contemporáneo representa “lo académico”?.